Un muro en Cuzco
04/04/2018
En Cuzco (Perú), capital del antiguo imperio Inca, hay un muro que está compuesto de dos zonas claramente diferenciadas.
Foto de https://livinmiami.wordpress.com/2012/04/27/cuzco-8/
Este muro, célebre por la película Diarios de Motocicleta, ha sido llamado el muro de los incas y de los incapaces. Realmente el contraste es evidente. Quizá incluso nos pueda parecer que era imposible que los incas construyesen sus muros con esas piedras tan grandes, tan pesadas. Tenemos la misma mentalidad que la del muro construido por los españoles.
Y es que es todo cuestión de mentalidad, de prioridades. Las prioridades de los españoles eran otras. Son otras, porque esas prioridades siguen siendo lo mismo y forman parte de lo más profundo de la cultura. La mentalidad del muro español refleja varias cosas.
Rapidez, es importante construir algo rápidamente. El muro inca posiblemente tardó más en construirse que el español, hecho de bloques más pequeños. Más rápida su extracción, más rápido su transporte, más rápida su colocación. Si hacemos rápidamente una tarea, podemos empezar a hacer otra tarea antes y al final, hemos hecho más tareas.
Flexibilidad, es importante poder reaprovechar el trabajo ya realizado. Si producimos bloques más pequeños, estos nos pueden servir para otros muros, podemos tapar otros huecos, no estamos limitados al muro en concreto que estamos construyendo.
Pragmatismo, es importante centrarse en el objetivo final de nuestras tareas. Un muro cumple la función de separar la calle de la casa, aislarla del frío, los ladrones y las miradas furtivas. Si cumple esas cualidades, ya tenemos un buen muro y cuánto más simple sea el mecanismo por el cuál ese muro acaba construido, mejor. No estamos para complicarnos con mundanidades.
Los incas tenían otra mentalidad cuando construyeron este muro.
Durabilidad, es importante que las cosas que hagamos duren el mayor tiempo posible. Los bloques grandes aguantan más, son más difíciles de romper. Los muros con muchos bloques tienes más lugares de posibles grietas, donde puede entrar el agua. Al final con el tiempo, hemos perdido menos el tiempo con este muro que si lo hubiésemos hecho rápido, pero costó más de entrada.
Seguridad, es importante que las cosas que construyamos generen el menor número de situaciones peligrosas. En la zona de Cuzco los terremotos son algo relativamente habitual. Los bloques grandes soportan mejor los terremotos y reducen las vibraciones que se transmiten.
Naturaleza, es importante que nuestras obras sean similares a la naturaleza, de quien venimos, y fuente inagotable de sabiduría puesta en práctica. En la naturaleza encontramos grandes rocas por dóquier, son el día a día en el mundo fuera de la ciudad.
Superación, el hombre siempre se pone metas para ver si es capaz de superarse. Cada momento en la vida es una oportunidad para hacerlo, da igual que se esté construyendo solo un muro, al final la magnificiencia se entrena. Construir con estas enormes piedras no es fácil, pero ahí estamos para superar esa dificultad y que la gente al verlo quede estupefacta.
Pero ante todo, ambos imperios cuando construyeron este muro lo hicieron de la forma correcta, la que ellos consideraban natural, posiblemente nunca se cuestionaron a sí mismos porque hacían los muros así. Era algo evidente para ellos.
Quizá nunca llegamos a entender la mentalidad de los incas y por qué construían sus muros así, quizá las razones que he dado aquí no tengan nada que ver con sus verdaderos motivos, su mentalidad y sus prioridades. De todos modos, ¿eres un inca o un incapaz?
Foto de https://livinmiami.wordpress.com/2012/04/27/cuzco-8/
Este muro, célebre por la película Diarios de Motocicleta, ha sido llamado el muro de los incas y de los incapaces. Realmente el contraste es evidente. Quizá incluso nos pueda parecer que era imposible que los incas construyesen sus muros con esas piedras tan grandes, tan pesadas. Tenemos la misma mentalidad que la del muro construido por los españoles.
Y es que es todo cuestión de mentalidad, de prioridades. Las prioridades de los españoles eran otras. Son otras, porque esas prioridades siguen siendo lo mismo y forman parte de lo más profundo de la cultura. La mentalidad del muro español refleja varias cosas.
Rapidez, es importante construir algo rápidamente. El muro inca posiblemente tardó más en construirse que el español, hecho de bloques más pequeños. Más rápida su extracción, más rápido su transporte, más rápida su colocación. Si hacemos rápidamente una tarea, podemos empezar a hacer otra tarea antes y al final, hemos hecho más tareas.
Flexibilidad, es importante poder reaprovechar el trabajo ya realizado. Si producimos bloques más pequeños, estos nos pueden servir para otros muros, podemos tapar otros huecos, no estamos limitados al muro en concreto que estamos construyendo.
Pragmatismo, es importante centrarse en el objetivo final de nuestras tareas. Un muro cumple la función de separar la calle de la casa, aislarla del frío, los ladrones y las miradas furtivas. Si cumple esas cualidades, ya tenemos un buen muro y cuánto más simple sea el mecanismo por el cuál ese muro acaba construido, mejor. No estamos para complicarnos con mundanidades.
Los incas tenían otra mentalidad cuando construyeron este muro.
Durabilidad, es importante que las cosas que hagamos duren el mayor tiempo posible. Los bloques grandes aguantan más, son más difíciles de romper. Los muros con muchos bloques tienes más lugares de posibles grietas, donde puede entrar el agua. Al final con el tiempo, hemos perdido menos el tiempo con este muro que si lo hubiésemos hecho rápido, pero costó más de entrada.
Seguridad, es importante que las cosas que construyamos generen el menor número de situaciones peligrosas. En la zona de Cuzco los terremotos son algo relativamente habitual. Los bloques grandes soportan mejor los terremotos y reducen las vibraciones que se transmiten.
Naturaleza, es importante que nuestras obras sean similares a la naturaleza, de quien venimos, y fuente inagotable de sabiduría puesta en práctica. En la naturaleza encontramos grandes rocas por dóquier, son el día a día en el mundo fuera de la ciudad.
Superación, el hombre siempre se pone metas para ver si es capaz de superarse. Cada momento en la vida es una oportunidad para hacerlo, da igual que se esté construyendo solo un muro, al final la magnificiencia se entrena. Construir con estas enormes piedras no es fácil, pero ahí estamos para superar esa dificultad y que la gente al verlo quede estupefacta.
Pero ante todo, ambos imperios cuando construyeron este muro lo hicieron de la forma correcta, la que ellos consideraban natural, posiblemente nunca se cuestionaron a sí mismos porque hacían los muros así. Era algo evidente para ellos.
Quizá nunca llegamos a entender la mentalidad de los incas y por qué construían sus muros así, quizá las razones que he dado aquí no tengan nada que ver con sus verdaderos motivos, su mentalidad y sus prioridades. De todos modos, ¿eres un inca o un incapaz?